miércoles, 11 de noviembre de 2015

Mi perdón

Hoy es un día difícil.
Hoy necesito mi perdón.
Hoy me perdono a mi mismo.
Y lo tengo que contar.

Hoy hace unos días que una persona importante se marcho para no volver. Se marcha un pilar importante en mi niñez, y una de esas personas que sabes que te quieren sin condición. Y hoy necesito contarlo al mundo. Porque sucedió a dos días de mi cumpleaños, porque yo le dije que todo iba a salir bien, y no fue así. Porque fui el último familiar que habló con ella, y ya nunca más nadie volverá a hacerlo. Hoy me pido perdón porque sin el no puedo continuar el camino. Y hoy me perdono a mi mismo, porque los recuerdos me invaden sin quererlo, porque puedo poner excusas, puedo decir que no tengo tiempo para nada, porque puedo decir tantas cosas y prefiero no decirlas para evadir mi culpa, porque no la veía desde el ultimo cumpleaños de su nieta en el que coincidimos. Y hoy me parece tan importante, tan necesaria, que se me hace un nudo en la garganta. Porque recuerdo cada instante, cada momento, que en mi niñez ella dio tanto por mi, que me demostró tanto, y que tanto me quiso. Porque aun no siendo mi Madre, era como una segunda madre, que siempre estaba ahí. Por tantas y tantas horas que en su casa pase, con mis primos jugando, y siendo como un hijo más para ella. Hoy me pido perdón, por no pasar más tiempo con ella. Me lo pido porque lo necesito, y me perdono porque se que ella me perdona allí donde esté.
Freddie Mercury decía que el show debe continuar, y hoy llevaré esa frase por estandarte. Peleare cada segundo de mi vida, sabiendo que otra persona más cuida de mi en el más allá. Solo me queda el consuelo de saber que ella está donde quería estar, con mi abuela, con mi abuelo y con mi tío. Ahora solo queda luchar por los que se quedan y seguir bebiéndome la vida como si alguien me quitara el vaso. Hoy me miro en el espejo y me digo "te perdono", pero vive cada día como si fuera el último y no te dejes nada por hacer.
Después de unos días duros, hoy siento que voy a vivir, siento que voy a luchar, y a no tirar la toalla por nada del mundo, ningún problema debe ser tan grande como para hundirme, hoy miro al cielo y pienso en ti, y te doy las gracias por tanto que me diste, y que siempre conservaré en el corazón.

Hasta siempre tita!!!  

No hay comentarios:

Publicar un comentario