Así es la vida.
Van pasando los años, y ya son mas de treinta. No pasa un solo día sin que aprenda algo nuevo, y hoy como las cosas son como son, y el ser humano es impredecible, me encuentro con ánimos de escribir un poco.
Pensando en las personas que pasan por nuestra vida, personas que nos dan y nos quitan (en el buen sentido de la palabra), personas de las que tanto hemos aprendido y que un día sin más desaparecen. No me refiero a la muerte, sino, simplemente se van de nuestra vida. En el primer instante nos sentimos desamparados, perdidos, solos, pero lo que hacen los años es enseñarte a ser paciente, y a saber que como el dicho ese que tanto hemos escuchado, Dios aprieta pero no ahoga. Personas que creías imprescindibles, se van, pero aparecen otras.
Y quizá, solo quizá, sea que en este momento me siento especialmente agradecido a la vida, ó quizá sea que los turnos de noche me confunden (como a Dinio), pero cada día tengo más claro, que cuando unas personas se van, otras mucho mejores están por aparecer en nuestra vida, porque progresar es nuestro objetivo, y la vida nos lo va dando según andamos el camino.
Me siento enormemente agradecido por esas personas que han pasado por mi vida, de las cuales tanto aprendí. Y aún mas orgulloso de las personas que hoy día forman parte de mi vida, algunas son las mismas de hace años, y parece que siempre estarán ahí, y no hay un día que no aprenda algo nuevo de ellas. Otras van apareciendo, y ganando un hueco en mi corazón, porque son realmente valiosas. Porque realmente el ser humano es maravilloso (como el anuncio de una bebida isotónica).
Un saludo
Paz y Amor para todos.
Gracias.
