Vivimos en unos tiempos en los que se van perdiendo los auténticos valores del ser humano, perdemos las formas con una facilidad pasmosa. El trabajo, el stress, la vida en general nos lleva a situaciones excesívamente tensas, en lo laboral, y en lo personal. No quiero entrar en conflicto socio-políticos, puesto que no es el objeto de este texto. Me encantaría transmitir a todos/as los que lean este texto, que la mayoria de las situaciones que vivimos a diario, que nos llevan a discusiones, e incluso desembocan en conflictos violentos, altercados, peleas, reyertas y demás situaciones no deseadas, se pueden arreglar con el diálogo. La comunicación es el don más preciado de nuestros tiempos, las palabras pueden obrar milagros. Y sobre todo antes de decir algo, piénsenlo. Hacer daño es algo fácil, las palabras tienen el don de hacer sentir bien o de herir a los que nos rodean. Utilicen la empatía, y piensen en las personas que aman, antes de decir algo que pueda dañar al receptor de su mensaje. Disfruten del diálogo sin hacer sufrir a nadie, utilicen la herramienta más importante de todos los tiempos con acritud. Recuerden que el que siembra vientos, recoge tempestades. Pero sobre todo, hablen, comenten, pregunten, es la mejor forma de conocer el porque de las cosas, y los sentimientos ajenos. Dejen de lado el televisor, la videoconsola, el ordenador, y hablen con las personas que les rodean. Hay un mundo por descubrir trás las palabras que decímos, solo hay que querer. Hablar y escuchar está en tus manos. Comprueben por ustedes mismos, la felicidad que pueden llegar a sentir si hablan, la comunicación puede aportar a sus vidas, mucho más que el dinero.
Saludos y Felicidad
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